Compartan sus experiencias...

ANIMENSE A ESCRIBIR Y PUBLICAR...

Escriban a so.bon@terra.es, incluyan la dirección de su correo y les autorizo a publicar sus historias.

domingo, 24 de octubre de 2010

Desnudo en Jaco...



(la imagen es de caracter ilustrativo)

Este fin de semana compartia con unos amigos un paseo a Jaco. Como todos saben, esta playa no es nudista... pero hay algunos riesgos que me gusta correr.

El sábado pasamos en la piscina de nuestro hotel hasta casi las 6 de la tarde, cuando empezó a oscurecer y llovía bastante. Mientras todos se fueron a duchar y cambiarse de ropa, decidi irme a la playa. La oscuridad era bastante cerrada y solo se percibian sombras a todos lados. Los demás hoteles se encontraban a escasos 100 metros de la playa y aunque se veían bien iluminados, me pregunté que tanto distinguian hasta donde yo estaba. Yo solo usaba mi pantaloneta y unas sandalias.

Sin demoras, y con el morbo que siempre me destaca por hacer nudismo, me baje la pantaloneta y quede como vine al mundo, la lluvia golpeaba fuerte sobre todo mi cuerpo castigandolo como pequeños latigos y a pesar del frio, mi miembro se vio estimulado y se irguió poco a poco.

Camine a lo largo de la playa sin encontrarme a nadie y mi erección iba y venía, cada vez que veía pequeños movimientos en las sombras a corta distancia. Descozco si podía ver al hombre desnudo a lo lejos, pero decidí seguir con naturalidad.

Unos 20 minutos después estaba llegando al final de la playa, donde un pequeño río corta el paso a otra pequeña playa. Ahí decidi sentarme en la arena y juquetear con mi pene semierecto, decidido a experimentar un buen sobo, bajo la lluvia, en la arena, cerca del mar...

Mientras mi respiración se aceleraba, tiraba y frotaba mi pene sin compasión, tratando de alcanzar un orgazmo intenso y prolongado, mi cuerpo caliente era castigado por la lluvia como pequeños latigazos, lo que hacía que mi exitación creciera más...

Mientras sentía mi semen cada vez más pronto, frotaba con mi mano libre mi pecho y aumentaba el ritmo, para acelerar la salida del preciado liquido blanco. Deje escapar mis quejidos y jadeos mientras en la oscuridad y con los ojos cerrados, gozaba mi propia sexualidad. El chorro intenso y tibio golpeo mi abomen y mi carne tremula se mecía sin control en un exitante orgasmo.

"Que rico!" La expresión venia de mi costado izquierdo, por lo que abrí los ojos asustado y tratando de encontrar al personaje que me había pillado. A mi lado un tipo bastante bien formado me miraba, y aunque estaba oscuro, pude ver una sonrisa divertida y picara a la vez.

Me recline y sin saber que decir, replique "Hola!" Mi pantaloneta estaba a varios metros de donde yo estaba, por lo que no pensé en tratar de alcanzarla.

"No pensé que cosas así pasaran acá" me replico. Yo miraba a todas partes, tratando de descubrir si aluna otra persona o vehículo se encontraba cerca, sin embargo solo la oscuridad nos rodeaba. Un rayo ilumino un poco y pude comprobar que al igual que yo, solo usaba una pantaloneta larga. Su torso desnudo belludo como el mio, estaba bien proporcionado, y sus brazos y piernas lucian musculosas.

"Ah Bueno!" solo atine a decir, mientras trataba de quitar el semen de mi estomago con la lluvia que caia. El movimiento del tipo me llamo la atención, ya que se inclinaba hacia mi, lo cual me hizo saltar un poco por lo sorpresivo de la situación. Sin embargo no se inclinaba hacía mi, se inclinaba para quitarse la pantaloneta, mostrando un pene largo y un tanto erecto, bastante más blanco que su torso, brazos o piernas. Luego con un movimiento fuerte de su brazo lanzo la pantaloneta hecha un puño, hacia la mía que estaba más allá. Algo pesado en la pantaloneta la hizo cruzar el viento como una flecha y cayo a poco más de un metro al lado de la mía.

Sin más, se agacho y se sento a mi lado, extendiendo su mano en saludo "Carlos"... "Sobon" respondi... "mucho gusto". Había extendido la mano que yo había usado para sobarmela, pero la tomo sin inmutarse mientras parecia sonreir.

"A veces uno necesita desahogarse" me dijo.
"Si, eso intentaba" respondi, al tiempo que veía como se empezaba suavemente a masturbar. Lo cual hizo que una nueva erección empezara a llegarme.
"Yo estoy con mi familia, pero no puedo hacer esto alla" agrego "Te importa".
Negue con la cabeza, mientras se inclinaba para acostarse en la playa, masturbandose al tiempo que con su mano, acariciaba su pecho y abdomen. Mientras yo hacía lo mio con mi pene, él tipo jadeaba y se estremecia y ambos experimentabamos un estremecimiento por el placer de hacer algo tan prohibido en una playa completamente pública.

Al poco rato el se vino, por lo que me eche en la arena y di nuevamente rienda suelta a mi pene hambriento. Para cuando me vine escuche la misma expresión y vi su cara de satisfacción al compartir algo que definitivamente solo pueden experimentar dos amigos con madures para sobarsela en las formas más inimaginables.

No hay comentarios: